El Clásico más descafeinado de todos -que no se malinterprete lo de descafeinado, es por los aficionados-. Todo tranquilo, besos, abrazos, saludos en el túnel de vestuarios minutos antes de empezar el partido, como quién dice, la Euro sanó todas las heridas que habían -si de verdad las habían-.
La primera sorpresa la había tirado ya Mou, con su confianza en Callejón por delante de Di María. Un primer tiempo que dominó el Barcelona, el Madrid metido atrás, lineas juntas -poco menos de 10mts entre cada linea- y compactas, esperando un error del Barcelona o robar un balón para salir al contragolpe, acción que nunca llegó, pero podemos decir que el Madrid atacó defendiéndose, con Arbeloa, Albiol, Ramos y Coentrao de titulares, Callejón haciendo trivote con Alonso y Khedira, Özil como enganche y Cristiano a un lado cambiándose de banda de cada rato y Benzema como referencia, 4-3-2-1 por parte del Madrid y un típico 4-3-3 del Barcelona pero con Adriano en vez de Jordi Alba como se esperaba.
El Barcelona adelantaba lineas mientras el Madrid las retrocedia cada vez más -merito del Barcelona, claro-, los blaugranas más horizontales que nunca, como no podían entrar por el centro tocando, trataron de abrir el campo, con diagonales, bien profundos, abiertos los extremos y soltando a los laterales, perdieron oportunidades pero y se puede decir que todo el primer tiempo fue del Barcelona. El Madrid no se encontraba del mediocampo hacía delante, pases y asistencias erradas pero mucho no se le puede reprochar a los delanteros del Madrid pues el arco les quedaba a 60 metros, imposible.
Según Mourinho no quisieron salir con ese estilo, que fue el Barcelona quien los metió atrás, sea o no sea verdad lo que dijo Mou, la verdad es que les salió barato el primer tiempo, mucho.
Ya en el segundo con una mentalidad diferente la del Madrid, más explosivo, más directo, los delanteros cerca del área y un Barcelona distraído me recordó a los minutos finales del clásico anterior, a los diez minutos del segundo tiempo un tiro de esquina de Özil llego a la cabeza de un Cristiano en el aire, gol. Cristiano volvió a mandar a callar al Camp Nou pero esta vez fue diferente, un minuto después tras un gran pase de Mascherano a banda cambiada y un gran control y definición de Pedrito pusieron tablas de nuevo, dudoso el gol porque para mí estaba por poco en off side pero no vayamos a caer en eso de nuevo, basta de los Villaratos, a disfrutar.
60 minutos estuvo algo desaparecido o tapado por la defensa del Madrid, Andrés Iniesta cuando aparece Iniesta el Barcelona juega a otro ritmo, un enganche que se comió Ramos adentro del área el arbitro cantó pena máxima y quien más para marcarlo que Messi, que ya llevaba 4 clásicos sin ver puerta, volteada ya la papeleta Mou empezó a hacer los cambios: Benzema por Higuaín, Di María por Callejón y Marcelo por un Özil desaparecido excepto en el gol de Cristiano, el juego de lMadrid revolucionó con estos cambios, otro ritmo de partido pero, llego un golazo de Xavi, tras un tiki-taka desde su propia área e Iniesta arrastrando marca y dando un pase magnifico a Xavi que lo habilitaba Arbeloa, 3-1 parecía todo decidido pero el Ángel del Madrid ayudado por Victor Valdés anotaron gol 7 minutos antes del final.
3-2. Queda la vuelta en el Bernabeú, dos equipos ya formados, con un estilo definido y claro de lo que quieren hacer saldrán a dar otro partidazo y un golpe en la mesa. Los dos saldrán a ganar indefinidamente del estilo que lo haga cada uno. Todo sigue vivo, que siga la acción.