(IB) - Hubo pánico a bordo cuando, durante la madrugada, el viaje de placer al Caribe se vio interrumpido por un fuerte incendio que afectó la parte trasera del crucero de Royal Caribbean. La nave debió desviarse de urgencia a un puerto de las Bahamas para evacuar a los 2.224 pasajeros y los 796 tripulantes.
El crucero provenía de los Estados Unidos y se dirigía a CocoCay, en las Bahamas, pero terminó en el Freeport de ese archipiélago y, horas más tarde, los viajeros fueron trasladados de regreso a su casa, en Baltimore, ya que la travesía debió ser cancelada.
Los bomberos tardaron alrededor de dos horas en extinguir las llamas, que tomaron la tercera y la cuarta cubierta de la embarcación Grandeur of the Seas. Según reportan las agencias de noticias, no hubo que lamentar heridos de gravedad.
A todos los afectados por este incendio -del que aún se desconocen las causas- se les devolverá el dinero y se les ofrecerá descuentos en futuros cruceros, de acuerdo con un comunicado de la compañía.