Quien conoce de béisbol sabe que
actualmente no hay jugador como Miguel Cabrera en las mayores. Para el
fanático venezolano resulta algo glorioso tener un representante de este
calibre en el mejor béisbol del mundo y más, que año tras año vaya sumando logros
a su historial como pelotero. El respeto que ya se había ganado Miguel Cabrera en
la MLB (2012) por haberse convertido en el primer bateador en 45 años en ganar
la Triple Corona, lo reiteró este 2013 con una actuación memorable y luchando
contra las lesiones que lo frenaron, pero que no evitaron que hiciera historia
una vez más.
Todo
nos indica que Miguelito tuvo un 2013 más impresionante. Fue nuevamente el
mejor bateador del nuevo circuito al presentar un promedio de: .348, conectando
44 jonrones e impulsando un total de 137 carreras, que le permitieron además
conseguir su segundo premio “Hank Aaron”, su quinto bate de plata, la tercera
corona de bateo consecutiva y en definitiva lo más histórico: su segundo premio
MVP en su carrera. Logró la grandiosa hazaña de ser el primer venezolano en conseguir
dos premios de Jugador Más Valioso (MVP) de la liga americana de MLB.
Muchos
premios en un año que no fue tan fácil para Cabrera. Luchó hasta al cansancio
contra las lesiones que lo limitaron a jugar 148 juegos con los Tigres y a
pesar de eso, este año completó una de sus mejores ofensivas de todos los
tiempos. Además, tuvo que luchar contra el primera base de los Orioles de
Baltimore, Chris Davis, quien le arrebató el liderato de jonrones y le impidió
convertirse en el primer jugador en ganar dos Triple Corona de manera consecutiva.
Sin duda, habría sido algo apoteósico si lo hubiese conseguido… ¿Pero, que más
le podemos pedir a Cabrera después de todo lo que nos ha dado?
En
otras menciones, el de Maracay fue galardonado como el “Tigre del año” por su
equipo. Aparte del MVP y el “Luis Aparicio”, obtuvo dos Players Choice Award
como Jugador del Año y Jugador Más Sobresaliente de la Liga Americana, el Hank
Aaron y el Bate de plata. Fue titular en el Juego de Estrellas (3era base) y
ganó el premio ESPY 2013 por el mejor jugador de la MLB. Muchos fueron los
galardones de Miguel Cabrera y ni decir, todas las marcas que alcanzó y superó.
Una de las cosas curiosas que dejó su 2013, fue el hecho inédito que vivió
contra el histórico cerrador de los Yankees de Nueva York, Mariano Rivera. Se
convirtió en el único jugador en sacársela en dos oportunidades en su año de
retiro.
Su
inteligencia frente al plato y, su visión y habilidad para reconocer los pitcheos, es lo que hace año tras año más
grande a Miguel Cabrera. Uno de los que siempre ha destacado el jugador
especial que es Miguelito, ha sido su ex mánager en los Tigres de Detroit, Jim
Leyland. "Es difícil describir con palabras lo especial que este
chico es, y sólo espero que Detroit sepa lo afortunado que es de tener a un
pelotero como éste en sus filas. Están viendo historia. Están viendo algo que
quizás no vuelvan a ver. Es increíble" afirmó.
Tras
todo lo conseguido, él sigue expresando que desea ganar la Serie Mundial y que
se sigue preparando para ser mejor cada vez más. Está lo suficientemente
confiado para comenzar a hablar sobre las maneras en que puede mejorar en el
2014 y como mantener el ritmo que lleva desde la temporada 2012. “Cada día trato de mejorar como bateador y ser
más consistente. Siempre trato de aprender algo cada día para sentirme más
cómodo en el plato. La meta para llegar a lo más alto es trabajar fuerte todos
los días” expresó.
Es
imposible no creer en la grandeza de Miguel Cabrera y no pensar que ya dejó su
nombre grabado en la historia del béisbol venezolano. No se rinde, en el 2014 va por más…