En Reino Unido combaten las diferencias de género a través de la literatura infantil.

(PD-BLOG) - Es tan usual la marcada línea que divide lo azul de lo rosa que pasa casi inadvertida para todos. La segmentación de sexos es un asunto del que se habla desde hace años y con esa conversación a medida de que más mentes se abren, más acciones se toman para que los estereotipos desaparezcan. 

Según el sitio web de The Guardian, de allí nace la campaña “Let Books Be Books” (Permite que los libros sean libros) en Reino Unido, que busca presionar a los editores para detener el mercado de libros que promuevan “estereotipos limitantes de género”. La petición que hace un llamado a los editores a dejar de etiquetar los libros en sus títulos o empaques para niñas o niños ha recogido más de 3.000 firmas. 

Distintos escritores y padres han manifestado su apoyo, afirmando que “decirle a los niños cuales historias o actividades son correctas para su género cierra las puertas a campos enteros de interés”. Este movimiento nació por iniciativa de la campaña “Let Toys Be Toys” (Permite que los juguetes sean juguetes), cuyo objetivo es el mismo, pero enfocado en el cese de la venta de juguetes etiquetados para niños o niñas. 

Este proyecto ha tenido el apoyo de la gran cadena de librerías de Reino Unido Waterstone’s y de distintos, editores y publicistas quienes rechazan fuertemente estas etiquetas y prefieren que sean otros factores los que lleven a los niños a escoger lo que deseen leer.

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