(TEENAGETHUNDER) - La desgraciada muerte de Paul Walker en noviembre de 2013 pilló a todos por sorpresa.
El guapo y joven actor se encontraba rodando la séptima película de la franquicia Fast and Furious, y su trabajo se quedó a medias. Después de unas semanas de luto los estudios Universal estuvieron tomando decisiones. La primera, retrasar el estreno de la película. La segunda, cambiar el guión para adaptarlo a la desaparición de Paul, pero manteniendo su personaje y dándole una salida digna y emocionante de la saga. Quedaba por resolver la parte más complicada. Cómo hacerlo.
Cuatro actores con un físico muy similar al de Paul han sido contratados. Serán usados para reproducir los movimientos del personaje y como base. La cara y la voz de Paul Walker se colocarán encima de estos actores usando técnicas informáticas. Universal Pictures cree que esta es la solución más satisfactoria y que los fans se sentirán satisfechos con el resultado.
Esta película abre la puerta a un mundo de posibilidades. No es la primera vez que un actor muerto durante el rodaje de una película completa su participación por medios tecnológicos, como fue el caso de Brandon Lee en El Cuervo. Esta vez parece que los efectos especiales se van a ver obligados a evolucionar para ofrecernos a un Paul Walker creíble durante algo más que un par de planos breves. No nos cabe la menor duda de que estamos a un paso de ver películas protagonizadas por actores que llevan muchos años fallecidos.
