(PD-BLOG) - A veces la realidad es más terrible que la ficción al tratarse de crímenes, y cuando estos son transformados a trabajos periodísticos-literarios bajo la pluma de Truman Capote, nacen obras de no-ficción imprescindibles para periodistas como "A Sangre Fría".
Luego del asesinato sin motivo aparente de una familia próspera, común y corriente de Kansas, el pueblo se conmocionó y surgió la hipótesis de que cualquiera podría ser asesinado en cualquier momento. La noticia tuvo una gran cobertura y Truman Capote acudió al pueblo Holcomb, en donde había ocurrido el suceso para hacer una investigación de profundidad con la ayuda de Harper Lee, autora de Matar un Ruiseñor.
Capote se acercó a los habitantes del pueblo además de los dos ex-convictos que habrían ejecutado el crimen, narrando la historia de una manera que únicamente se puede lograr involucrándose, y es esta característica la que ayudó enormemente a que fuese considerado uno de los escritores norteamericanos más influyentes del siglo XX.
El sitio Lecturalia reseña: "Capote sigue paso a paso la vida del pequeño pueblecito, esboza retratos de los que serían víctimas de una muerte tan espantosa como insospechada, acompaña a la policía en las pesquisas que condujeron al descubrimiento y detención de Hickcock y Smith y, sobre todo, se concentra en los dos criminales psicópatas hasta construir dos personajes perfectamente perfilados, a los que el lector llegará a conocer íntimamente. 'A sangre fría', que fue bautizada, pionera y provocativamente, por Capote como una «non fiction novel», es un libro estremecedor que, desde la fecha misma de su publicación, se convirtió en un clásico".
Además de las películas sobre la vida del escritor, en donde la novela juega un papel importante, existe una de 1967 basada en la historia con el mismo nombre, narrada por el mismo Truman Capote y nominada a 4 premios Oscar.
