(BBC) - Nicaragua vive días de vísperas y no sólo por la proximidad de la Navidad: la sensación de que algo grande está a la vuelta de la esquina es cada vez más fuerte en este pequeño país centroamericano.
Y mucho tiene que ver la anunciada ceremonia de inicio de obra del Gran Canal Interoceánico de Nicaragua, el paso artificial que triplicaría en tamaño al vecino Canal de Panamá, prevista para este 22 de diciembre.
Aquí, sin embargo, todavía hay muchos que aún no creen en el gigantesco proyecto otorgado en concesión hace poco más de año y medio al HKND Group, un consorcio internacional que tiene como cabeza visible a un empresario chino y su sede en Hong Kong.
Y eso significa que la sensación de expectativa que se respira en varias partes del país también refleja las dudas de quienes temen que la ambiciosa apuesta nicaragüense –que representaría la culminación de un sueño de siglos– pueda terminar saliendo mal. Muy mal.
Aunque, por el momento, de lo único que se puede estar seguro es que el proyecto de canal empezó a dividir a los nicaragüenses de muchas maneras desde antes del inicio de cualquier excavación.