Doscientos iraquíes que protestaban por el asesinato de un vecino en la zona de Rutba, en la provincia occidental de Al Anbar, fueron secuestrados
Según el OSDH, basado en Gran Bretaña, Estado Islámico ejecutó a 3.156 personas en Siria desde junio de 2014, entre ellas, 1.841 civiles. El grupo está acusado de crímenes contra la humanidad por la ONU.
Las restantes 59 víctimas incluyen a miembros del propio grupo extremista, combatientes rebeldes y a miembros de las fuerzas del presidente Bashar al Asad, indicó el OSDH, que dispone de una amplia red de informadores en Siria, según La Nación.
La brujería, la homosexualidad y la colaboración con la coalición dirigida por Estados Unidos figuran entre los “crímenes” susceptibles de ser castigados con la pena de muerte en las zonas controladas por el EI. En enero, el mundo vio con horror las imágenes de un video en que se veía a miembros de Estad Islámico empujar al vacío a dos personas homosexuales.
El grupo extremista sunita, que proclamó un “califato” en junio de 2014 a caballo entre Siria e Irak, conquistó en Siria zonas en las provincias de Homs y Hama (centro), Deir Ezor et Hasaké (noreste), así como Raqa y Alepo (norte).
Doscientos iraquíes que protestaban por el asesinato de un vecino en la zona de Rutba, en la provincia occidental de Al Anbar, fueron secuestrados por miembros de Estado Islámico y se desconoce su paradero. El 27 de agosto, Estado Islámico reivindicó el atentado con coche bomba que provocó la muerte de dos altos mandos del Ejército iraquí, según un comunicado del grupo y aseguró que todos los que participaron en el atentado eran extranjeros.