Hace aproximadamente cuatro meses, los 'blues' echaban a los suizos del gran sueño de alcanzar una final continental. Ese doble enfrentamiento de semifinales de la Europa League entre ambos clubes, terminó con un 5-2 en el global, con dos victorias del Chelsea. Eliminatoria que de forma directa sirvió de antesala para el título final que alzaba Rafa Benítez en el estreno para los de Stamford Bridge en el palmarés de esta competición.
Hoy el panorama para los londineses ya tiene otra actualidad. José Mourinho ha regresado al club de "sus amores" teniendo como uno de sus principales objetivos el poder conquistar la Champions League, después de no poder hacerlo en su estadía anterior (perdió dos seminifinales ante Liverpool y una final contra el Manchester United) la cual duró cuatro temporadas (de 2004 a 2008).
Los 'blues' regresan a Stamford Bridge después de tres salidas consecutivas desfortunadas, pero con la alegría de poder iniciar en casa una nueva temporada de Champions League. El barco que dirige José Mourinho, llega con un plantel que genera grandes sensaciones, que rebosa calidad, con variantes en el tercio final del campo y con un ataque en el que se ha puesto toda la confianza: liderado por el camerunés Samuel Eto'o y el español Fernando Torres. El portugués con este equipo armado, confía para abrirse paso en un grupo en el que le esperan además de los suizos, el Schalke 04 y el Steaua de Bucarest.
Por su parte el Basilea, llega a Londres con ganas de sorprender y tomar revancha por lo ocurrido en las semifinales pasadas de Europa League. En el marco del partido, los suizos son inferiores a los locales; sin embargo, han demostrado que le pueden competir a los grandes y ocasionarle digustos a más de uno por allí.
Murat Yakin, ex jugador del club y ahora encargado del banquillo, pretende darle personalidad y carácter a un equipo que, aún siendo consciente de su inferioridad, no renuncia a nada en competiciones europeas. Este joven técnico, ha tenido que rediseñar un equipo titular que había vuelvo a sufrir la despedida de estrellas a final de la temporada pasada y que por lo mismo, quiere dar la campanada en un grupo que su particularidad, se le complica más que a cualquier otro club y que en cualquier oportunidad de victoria, tiene que aprovechar.
Mourinho más que nadie, sabe que en esta gran competición, no hay lugar para los concesiones y que la revancha es continua. Los suizos intentarán desarrollar su fútbol y complicarle la vida al Chelsea en propia cancha, estando concientes de que cada punto vale oro en sus aspiraciones de avanzar en la competición.
Stamford Bridge se viste de lujo en otra oportunidad, para presenciar uno de los torneos que generá una de las pasiones más grandes a nivel continental: la UEFA Champions League y que probablemente, en esta nueva temporada nos brinde grandes espectáculos y partidos inolvidables como en las últimas ediciones.
