Mourinho volvió a situar de inicio en el centro de su ataque al español Fernando Torres, que había mostrado su faceta más brillante en los últimos encuentros (remató al Manchester City con un gol en
el descuento la pasada jornada).
En esta ocasión, sin embargo, la defensa del Newcaslte había estudiado con detenimiento los movimientos del conjunto de Mourinho y desactivó durante todo el primer tiempo cualquier intento de los visitantes por acercarse al área del portero holandés Tim Krul.
Torres, que acabaría sustituido por el camerunés Samuel Eto'o a media hora del final, no encontraba espacios en esta ocasión, mientras que su compatriota Juan Mata, también en el once titular, se veía hoy incapaz de crearlos desde el centro el campo.
El partido se mantuvo trabado hasta el descanso. El Newcastle había encontrado el modo de contrarrestar el ataque del Chelsea y Mourinho, que necesitaba encontrar un modo de recuperar el pulso del duelo, saltó al césped tras la charla en el vestuario antes que sus jugadores y se sentó solitario en el banquillo durante cinco minutos.
El técnico portugués aún esperó un cuarto de hora para cambiar algunas piezas de su equipo, ante la inmovilidad en la que continuaba instalado el partido.
Torres dejó su sitio a Eto'o y Mata se sentó para dar entrada al brasileño Willian, pero todo continuó igual, incluso peor para el Chelsea.
Poco después de los cambios, el Newcastle asestó a los visitantes el primer gol de la tarde, obra del francés Yoan Gouffran por medio de una falta ensayada.
El delantero local corrió en diagonal hacia el centro del área del portero Petr Cech para recoger un largo pase vertical, desde más de cuarenta metros, y adelantarse a la defensa "blue" para rematar de cabeza el balón a la red.
El Chelsea tuvo oportunidad de empatar en el 78, en una jugada en la que Eto'o remató un balón increíble que se acabó estrellando en un defensa.
En el último tramo del duelo, los de Mourinho supieron imprimirle al partido el ritmo que no había tenido hasta entonces, si bien fueron incapaces de variar el resultado ante un Newcastle que apretó los dientes para contener con éxito los últimos ataques de los Blues.
Con el Chelsea concentrado en el ataque, el Newcastle aprovechó la ocasión para rematar a los de Mourinho con un segundo tanto que firmó el francés Loïc Rémy al rematar desde el centro del área un pase del holandés Vurnon Anita desde la izquierda.