"La conmemoración de este doloroso aniversario es una oportunidad para honrar la valentía y la perseverancia de los haitianos y de las haitianas, así como de los esfuerzos de su gobierno para mejorar las condiciones de vida de la población", agregó.
Por su parte, el Secretario General Adjunto de la OEA, Albert Ramdin, presidente del Grupo de Amigos de Haití, recordó que desde 2010, el 94% del total de hogares desplazados fueron reubicados, y destacó como hecho positivo que "la eliminación de escombros haya dado paso a la reconstrucción, al mejoramiento de la infraestructura, al crecimiento económico y a la creación de empleo". "Más niños van ahora a la escuela que antes y los indicadores de salud mejoran", apuntó.
El Embajador Ramdin sostuvo que "el trabajo duro que se ha realizado en los últimos años ha producido resultados concretos, que se deben celebrar, no hay que perder de vista todo lo que falta por realizar todos unidos".
En su mensaje de saludo al pueblo y al gobierno de Haiti en esta fecha, el Secretario General Insulza indicó que "para el beneficio de la población, es más que necesario que todos los actores de la nación haitiana unan sus esfuerzos y logren ponerse de acuerdo con los compromisos necesarios, con el fin de preservar los logros y garantizar un desarrollo duradero en Haití. Esto es tanto más urgente a medida que se acerca la fecha límite para resolver la crisis política que aflige a las instituciones democráticas". En este sentido, dijo que la OEA aplaude los intensos esfuerzos del Presidente Michel Martelly y el Parlamento en las últimas semanas para alcanzar un acuerdo.
Con estas palabras, el máximo representante de la OEA instó a todos los actores políticos a "trabajar de manera concertada para crear las condiciones necesarias para la realización en 2015 de elecciones libres y transparentes, que son esenciales para la preservación de los logros democráticos obtenidos y la estabilidad política del país". Aseguró que "la mejor manera de honrar a las miles de víctimas de aquella catástrofe es superar con valentía y unidad las dificultades políticas y de cualquier otro tipo, con el fin de seguir sin demora el trabajo necesario que permita a Haití y a su pueblo realizarse en todo su potencial".