(EL NACIONAL) - Tras su aplaudida actuación en el Super Bowl, la estrella del pop Katy Perry decidió realizarse un tatuaje que le recuerde para siempre el momento en que hizo vibrar a los millones de telespectadores que anoche siguieron la edición número 49 del evento deportivo.
"Pensé que sería apropiado dibujar con sangre esta noche…XLIX", escribió la cantante en la red social Instagram, donde publicó una fotografía del momento exacto en que un tatuador trabajaba sobre uno de sus dedos.
Tras unos minutos, la voz de "Roar" subió a Internet una nueva imagen, esta vez del tatuaje terminado: "XLIX".
El nuevo dibujo que Perry grabó en su piel es un número romano que hace referencia a la edición del Super Bowl en que le tocó participar. La artista se lució anoche sobre el escenario del University of Phoenix Stadium de Glendale, de Arizona, interpretando una selección de sus grandes éxitos, apoyada de una llamativa gama de efectos especiales y en compañía de Lenny Kravitz y Missy Elliott, quienes oficiaron como sus invitados.