(PD Blog) Los medios de comunicación en su irrefutable labor de informar y estimular el pensamiento crítico, abordan temas de actualidad, investigación y cubren una amplia gama de noticias, sin embargo, la televisión, el cine y la radio enfatizan en la volatilidad del mercado del entretenimiento y es la prensa escrita.
Los diarios, semanarios, periódicos y encartados la punta de lanza de críticas y polémicas en un medio que a diario circula por cada localidad, región o país donde por costumbre la línea editorial suele caracterizarse por ser irreverente.
La independencia y determinación con la que cada empresa editorial decide editar el material que circula en la calle, por tradición genera opiniones encontradas, críticas y polémicas entre propios y ajenos, políticos y gobiernos que reconocen que la prensa escrita es un medio tradicionalista de mayor fácil acceso a los ciudadanos.
En Venezuela la historia de la prensa escrita data de 1800 cuando Francisco de Miranda trae la imprenta al país y en 1818 con la fundación del Correo del Orinoco por parte del Libertador Simón Bolívar, con predominantes características independentistas y el empuje de la verdad absoluta y la publicación de los claros avances en la lucha de los criollos nacionalistas.
Actualmente a nivel nacional son cerca de una docena de medios impresos que a diario circulan en el país, beligerantes, abiertamente opositores o pro gobierno, con líneas editoriales que por tradición se caracterizan en generar suspicacia entre las figuras públicas más connotadas del país.
Es por tradición contemporánea y republicana, el Diario El Nacional fundado en 1943 que desde sus inicios y bajo el trabajo de las plumas y el teclado de destacadas figuras como Don Arturo Uslar Pietri, quienes incidieron en la forma veraz y certera de hacer periodismo escrito en el país, pues la editorial del Nacional nunca ha sido medida y complaciente con gobierno alguno, el tradicionalismo de informar y ser frontales ante la realidad del país lo convierte en el medio de comunicación impreso más polémico de lo contemporáneo, que guarda documentado en sus archivos, demandas, sanciones y acusaciones de distintos gobiernos, en distintos periodos y amplias diferencias políticas.
En los últimos 15 años y tras la llegada al poder del difunto presidente Hugo Chávez el papel de los medios de comunicación ha sido clave en el desarrollo de los eventos políticos nacionales, pero es la prensa escrita la trinchera de verdades que más se ha enfrentado a las disposiciones del gobierno, generando polémicas gubernamentales en cuanto una posible regulación certera y críticas y descalificaciones a sus presidentes, dueños y editores que se han desenvuelto en demandas y contrademandas.
La materia legal y legislativa ha hecho énfasis en la necesaria regulación de la prensa escrita como medidas privativas del libre ejercicio legítimo del derecho a la libre a expresión. En materia económica, en términos políticos y con insistencia en el área de sucesos, sanciones, medidas y restricciones se han tomado en contra de diarios y periódicos que disponen a publicar en circulación, cifras, imágenes y opiniones de alto impacto.
Prohibiciones en la publicación de cifras no oficiales, sanciones por parte del consejo de protección de niños, niñas y adolescentes a quienes publiquen imágenes de crímenes y entre otras tantas polémicas, la prohibición de publicaciones que se refieran o pongan en detrimento la salud mental del presidente de la república.
Medidas que no son exclusivas de los últimos periodos gubernamentales, desde la colonia, las dictaduras y el periodo democrático en Venezuela y en el mundo, es la libertad de prensa un punto álgido en las relaciones entre los funcionarios públicos y el deber de informar.