(ENFILME) - Una de las figuras más populares y respetados en el mundo de la música clásica contemporánea es el talentoso director de orquesta venezolano, Gustavo Dudamel. El actual director de la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles y de la Sinfónica de Gotemburgo, dará a conocer, el próximo mes de octubre, su primer trabajo como compositor de cine cuando se estrene Libertador (2013) en Estados Unidos.
El filme se centra en el militar y político venezolano, Simón Bolívar, una figura revolucionaria de Sudamérica que destacó por su lucha en contra del Imperio español a principios del siglo XIX, contribuyendo a que naciones como Venezuela, Bolivia, Colombia, Ecuador, Panamá y Perú obtuvieran su independencia.
Libertador, coproducción entre Venezuela y España, es protagonizada por Édgar Ramírez (Carlos, 2010; Wrath of the Titans, 2012) y dirigida por Alberto Arvelo. Fue precisamente la amistad entre Dudamel y Arvelo (ambos se conocieron en 2006 cuando el primero realizaba un documental sobre el programa de educación musical de Venezuela) lo que originó que el músico se involucrara en el filme. El cineasta habló al respecto:
Gustavo me estaba ayudando a concebir el estilo musical de la película y sugería varias referencias para el rodaje. Sus propuestas eran ideas y melodías brillantes… y de pronto ya estaba componiendo la música. Recuerdo el momento, él apoyado en el piano en su casa, cuando nos dimos cuenta de que Gustavo ya era el compositor.
Dudamel comenzó a escribir la música en el verano de 2012. A pesar de ser un destacado director de orquesta, no ha realizado muchas composiciones; sólo aquellos esfuerzos de adolescente cuando comenzaba a involucrarse en la música. Él ha estado fascinado con la música de cine desde su juventud, sin embargo, le pidió consejos a uno de sus experimentados amigos, John Williams.
El score fue interpretado por la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar en Caracas en enero de 2013, y Dudamel agregó el uso de instrumentos indígenas de América Latina, incluyendo un grupo de flautas fabricadas por el también músico, Pedro Eustache.
