Entre aplausos y abucheos fue recibido el mandatario venezolano por unos 12.000 espectadores presentes en las gradas del estadio Nueva Esparta de la ciudad oriental de La Asunción, capital del estado de mismo nombre que el recinto.
Maduro estuvo acompañado por su esposa Cilia Flores, fuertemente resguardado y seguido por el embajador de Cuba en Venezuela, Rogelio Polanco, el ministro del Deporte venezolano, Antonio Álvarez y el gobernador del estado Nueva Esparta, Carlos Mata Figueroa.
Entre los principales dirigentes deportivos se encontraba el presidente de la Confederación del Caribe, Francisco Puello Herrera, y los distintos presidente de las ligas de béisbol de México, Puerto Rico, República Dominicana, Cuba y Venezuela.
La ceremonia de apertura de la Serie del Caribe Margarita 2014 arrancó previamente con un espectáculo realizado por unos 300 bailarines y músicos del Sistema de Orquestas Juvenil de Venezuela, y que dio paso al segundo partido del día entre los equipos de Villa Clara, de Cuba, y Naranjeros de Hermosillo, de México.
El público que asistió a la primera jornada de la clásico caribeño fue inspeccionada con mucha cautela por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), lo que ocasionó demoras en el acceso al estadio.
En el partido inaugural, los Indios de Mayagüez puertorriqueños remontaron hoy por 7-6 a los Tigres del Licey dominicanos en la primera jornada de la edición 56 de la Serie del Caribe, celebrada en la Isla Margarita.
Una error en el décimo capítulo del campocorto Héctor Gómez al recibir un roletazo de Randy Ruiz permitió a Rey Navarro anotar la rayita de primera victoria de Puerto Rico en el Clásico del Caribe, frente a su rival histórico de la región.
El arranque del encuentro tuvo un desafío de pitcheo entre el derecho Giancarlo Alvarado, por los Indios, y el grandeliga cubano Yunesky Maya, con los Tigres.