(INFOBAE) - El papa Francisco rechazó la invitación de acudir al partido inaugural, que enfrentará a Brasil y Croacia en San Pablo, pero se comprometió a enviar un texto, confirmó la mandataria en una entrevista a periodistas deportivos de varios medios brasileños.
"Hablé con el papa Francisco de nuestra intención de que la Copa del Mundo sea un himno contra el racismo", contó Rouseff. La presidente dijo que su gobierno también está conversando con otros líderes "de todos los segmentos religiosos" para que realicen pronunciamientos similiares al del Santo Padre.
La idea es que el mensaje papal sea leído en la apertura mundialista por un jugador de la selección brasileña,
El tema del racismo en los campos de fútbol ha vuelto a los primeros lugares de la agenda tras el insulto recibido por el brasileño del Barcelona Dani Alves durante el partido contra el Villareal de la Liga Española.
Un simpatizante le arrojó desde la grada una banana, que el defensor, a modo de burla, comió en pleno campo de juego antes de patear un tiro de esquina.
Rousseff elogió la postura de Alves y se sumó a la campaña iniciada en las redes sociales por su compatriota Neymar, también del Barcelona. "A partir de ahora somos todos monos", dijo Rousseff, adoptando la etiqueta que el jugador lanzó en Twitter (#somostodosmacacos, en portuqués).
La campaña de Neymar mereció la adhesión de decenas de figuras del fútbol, como el uruguayo Luis Suárez y los argentinos Lionel Messi y Kun Agüero.
Según informó el diario Lance, a Rousseff "le gustó mucho" saber que el Villarreal identificó a la persona que lanzó el plátano a Alves y le prohibió volver al estadio El Madrigal de por vida.
