Con la llegada de Sculley a Apple, mucha gente coincide en decir que aquellos fueron los mejores años de la compañía. Uno de los primeros y más grandes logros a nivel comercial fue el lanzamiento del famoso comercial “1984” en el Superbowl de ese año. Se presentaría así el primer pequeño ordenador con interfaz gráfica. El propio Jobs diría que, nunca le importaba el tener la razón, si le importaba el éxito, y el hecho de que esta máquina tuviera una interfaz gráfica fue lo que más lo entusiasmó y a su vez “lo cegó” sin dejarle ver otros detalles que, de haberlos notado, habría sido importante. El romance Jobs-Sculley se fue debilitando hacia finales del 84, enfrascados en una lucha de poder dentro de la compañía buscando aliados en el staff, para cuando Steve cumplió los 30, se vió despedido de su propia compañía. Steve Jobs diría en una entrevista al respecto: “Contraté al tipo equivocado. Destruyó todo por lo cual yo había trabajado por 10 años, comenzando por mi.” Lejos de sentirse fracasado, Jobs dijo: “La pesadez de ser exitoso fue reemplazada por la liviandad de ser un principiante otra vez, menos seguro de todo. Me liberó para entrar en uno de los períodos más creativos de mi vida.” Jobs mismo aseguró que ser un desempleado a los 30, le permitió ir por algo mejor en su vida, así fue que pronto el carismático hombre; querido por muchos y rechazado por otros tantos; creó NeXT Computer.
Su idea era alcanzar a profesionales, académicos y científicos, dejando un poco de lado el público común, a lo cual ya había apuntado desde Apple. NeXT fue sin dudas una visión de Jobs para lo que vendría, con su carácter obsesivo y perfeccionista, pronto se centró en el software, experimentando con nuevas tecnologías además de desarrollarlas, y su aporte a NeXT desde éste punto de vista resulto perfecto. En un interesante video que circula en la red, se lo puede ver a Jobs en 1985 en medio de un “brain storming” con programadores y diseñadores que confiaron lo suficiente en él como para abandonar Apple y seguirlo en el nuevo emprendimiento. Alli Steve resalta “crear con el corazón”, solía decir que así se sabía lo que se hacía, no se ponía en riesgo a toda la compañía y se obtenía un resultado importante. A Jobs le gustaba mucho repetir una frase de Pablo Picasso: “Un buen artista copia. Un gran artista, roba” Con esto recalcaba que por mucho tiempo la gente se había sentido muy avergonzada por “robar” grandes ideas.
Hacia 1986, Jobs compró una empresa, The Graphic Group. Las intenciones originales sobre la base de la adquisición eran crear una compañía desarrolladora de hardware para gráficos. Sin embargo, la poca rentabilidad de las ventas al cabo de dos años, llevó a que The Graphic Group, conocida como Pixar, terminara siendo contratada por Disney para realizar películas de animación por computadora. Jobs no sólo llegó a marcar un antes y un después en el mundo de las computadoras, sino que supo también como revolucionar el cine. Una de sus frases recordadas: “Tenía más de un millón de dólares cuando tenía 23 años y más de diez millones cuando tenía 24 años y más de cien millones de dólares cuando tenía 25 años, y nunca fue importante porque nunca lo hice por dinero.”