No es el primer smartphone de la coreana en integrar un sistema de carga de este tipo, pero el sistema de carga del Galaxy S6 probablemente sea el definitivo no solo para la compañía, sino para el mercado de smartphones. La razón es que la apuesta de Samsung en este sentido tiene un matiz importante: universalidad.
En la actualidad conviven tres plataformas que tratan de imponer su propio estándar carga por inducción: el sistema Qi del Wireless Power Consortium (WPC), la plataforma de la Power Matters Alliance (PMA) y el de la Alliance for Wireless Power (A4WP). Estos dos últimos se han unido en un frente común en enero de este mismo año.
Samsung participa en las tres iniciativas, pero ha decidido no quedarse cruzado de brazos esperando a que se imponga uno de los sistemas. En cuanto han salido los primeros chips compatibles con los tres sistemas, Samsung los ha integrado en su línea de smartphones. El primer ejemplo de estos chips podría llegar en el S6 dentro de unos días.