Dos de estas instituciones son el Centro de Conciliación Familia y Empresa del IAE Business School de Argentina y Home Renaissance Foundation con sede en Londres.
Patricia Debeljuh, directora del Centro de Conciliación Familia y Empresa del IAE Business School de Argentina, estuvo recientemente en el país para presentar un documental con el que se busca llamar la atención sobre la relevancia de crear hogar, un tema que, según dijo, ha ido perdiendo importancia.
“Cada vez más el mundo del trabajo se tiene que preocupar por ese mundo familiar que tenemos las personas cuando salimos de la oficina”, introdujo Debeljuh.
“A nivel social se está perdiendo que es importante dedicarle tiempo al hogar, a la familia, a lo que uno quiera formar como sus seres queridos. Es importante que el ámbito laboral respete los tiempos que necesita esa familia, que las personas vuelvan a casa con un poco de energía porque cuando volvemos a casa tenemos que volver a ponernos a trabajar”, agregó.
Para Debeljuh, hay una riqueza incalculable en dedicarle tiempo al hogar, desde tareas que suenan tan simples como limpiar, lavar los platos, hacer la cama; incalculable porque es el servicio directo a las personas que se quiere.
“Si uno contrata a una persona que te haga este trabajo hay que pagarle, es un trabajo tan profesional como otro. Si tuviéramos que ponerle precio a ese trabajo engrosaría el producto bruto de un país porque es trabajo humano”, señaló.
“El trabajo doméstico y el trabajo manual generalmente no tiene reconocimiento porque, primero, se piensa que no necesita preparación previa, y segundo, porque el producto final no es apreciado y no se le distingue un valor agregado a eso”, expresa Sandra Idrovo Carlier, directora de investigación del Inalde Business School de Colombia, en el documental “Crear hogar, hacer visible lo invisible”, producido por el IAE y Home Renaissance Foundation.
En “management” ha cobrado fuerza la teoría del cuidado, es decir, que el empleador cuide a su empleado, pero la investigadora sostiene que donde en realidad se cultiva esa teoría es en la familia, porque ahí sus integrantes se cuidan de manera incondicional “y si eso la gente no lo aprende en la familia va a ser muy difícil que después lo pueda aplicar en la empresa”.
¿Qué beneficios obtienen las empresas al implementar prácticas que favorezcan el balance entre familia y trabajo? Debeljuh responde que mejoran sus niveles de productividad, en el compromiso del empleado, en motivación y se reducen los índices de absentismo y rotación.
Idrovo Carlier sostiene que cuando las empresas hablan de sostenibilidad tienen que tener en mente que la sostenibilidad se las dará la persona que trabaja en su organización como la sociedad en la que están funcionando.
“Las empresas deben adaptarse a esta nueva realidad porque si quieren atraer y retener talento tienen que considerar que las personas tienen una vida fuera del trabajo”, concluyó Debeljuh.