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El sismo de magnitud 5,7 se sintió en lugares tan lejanos como Nueva Delhi, la capital de India, y fue el último de una serie de temblores que han sacudido a Asia este mes.
El terremoto tuvo una profundidad de 64 kilómetros con su epicentro a unos 11 kilómetros de Mehtar Lam, la capital de la provincia oriental afgana de Laghman, según la página de internet del Servicio Geológico de Estados Unidos.
Informaciones iniciales de funcionarios en las vecinas provincias de Nangarhar y Kunar dijeron que cuatro personas habían muerto, aunque se esperaba que ese número aumentara. Sesenta y nueve personas resultaron heridas.
Cientos de casas se derrumbaron en Kunar, dijo el portavoz del gobernador provincial, Wasifullah Wasifi.
El miércoles hubo lluvias constantes en la mayor parte de Afganistán, lo que podría haber debilitado las casas de adobe en las que muchos afganos viven, dijo el vicejefe de la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres del país.
La agencia aún no tenía cifras de víctimas, agregó.
Los edificios oscilaron en Nueva Delhi y la gente salió corriendo a las calles en la disputada región norteña de Cachemira, donde un seísmo dejó unos 75.000 muertos en 2005, la mayoría del lado paquistaní.
El temblor del miércoles también se sintió en la capital de Pakistán, Islamabad.
La semana pasada, un temblor de magnitud 6,6 mató a casi 200 personas en el suroeste de China, días después de que otro potente terremoto matara a 35 personas en Pakistán, cerca de la frontera con Irán.