La llamada "droga caníbal" o ivory wave entró en circulación a mediados de 2010 y, desde ese momento, su consumo no paró de crecer, principalmente en los Estados Unidos y en algunos países europeos. Se aspira o se consume por vía oral. La mefradona es un claro antecedente, aunque por los terribles efectos que causa en el organismo y en la conducta fue rápidamente prohibida.
Sin embargo, el ivory wave, que todavía es legal en la mayor parte del mundo, parece provocar alteraciones aún más drásticas, si bien todavía no pudo ser estudiado en profundidad.
Los efectos
"Tiene propiedades estimulantes, que incrementan el ritmo cardíaco y la presión sanguínea, y alucinógenas. La gente que lo consume puede ver y escuchar cosas, o encontrarse con personas que no están realmente allí y observar todo de una manera muy extraña. Pueden tener efectos disociativos, por los cuales el sujeto se siente fuera de su cuerpo. Muchos de los que lo probaron experimentaron una paranoia extrema. Sentían que la gente que está a su alrededor, incluso seres queridos, pretendían lastimarlos", comentó Mark Ryan, un experto en drogas sintéticas del Louisiana Poison Center.