(NOTICINE) - Divergent, el nuevo intento de trasladar a la gran pantalla libros de fantasía o ciencia-ficción destinados a los jóvenes lectores, ha conseguido acertar con los imprevisibles gustos de la audiencia.
Incluso mejorando algo las previsiones, la cinta protagonizada por Shailene Woodley alcanzó la primera plaza de la taquilla norteamericana con 56 millones de dólares. Pese a obtener la segunda plaza, Muppets Most Wanted quedó bien lejos de la previa The Muppets (2011) debutando con unos modestos 16,5 millones. Un tercer estreno, este menor en salas (780), el confesional God's Not Dead recibió el apoyo de las comunidades cristianas y logró una quinta plaza con algo más de 8 millones y medio.
Ya antes de estrenarse, los productores de Divergente, Lionsgate y Summit, responsables de la muy exitosa franquicia Twilight, habían aprobado la producción de una secuela. No se equivocaron, ya que sin llegar a los niveles de aquella historia de vampiros y hombres lobo, la nueva adaptación de una fantasía literaria juvenil ha conseguido no sólo esos sólidos 56 millones, sino también una "A" en las encuestas de CinemaScore, a pesar de las críticas mayoritariamente negativas de los medios.
Recordemos que Crepúsculo debutó con casi 70 y The Hunger Games alcanzó unos espectaculares 152,5 millones en sus respectivos primeros fines de semana.
Divergente, además, no es una película demasiado cara. Costó 85 millones, que se recuperarán con creces en el propio mercado doméstico norteamericano. En esta ocasión el lanzamiento en el exterior se llevará a cabo el mes próximo en la mayoría del resto del mundo, pero se confía en una también buena acogida.
Más fría ha sido la de la infantil Muppets Most Wanted, la nueva cinta de los personajes creados por Jim Henson, que también con malas críticas, ha recibido una floja valoración de los espectadores ("B" en CinemaScore) y se ha tenido que conformar con unos modestos 16,5 millones de dólares, lejos de los 29,2 millones que logró en 2011 Los Muppets. En cualquier caso, la popularidad internacional de los muñecos televisivos garantiza la recuperación de los 50 millones que tuvo de presupuesto.
Pocas semanas después del lanzamiento de otra cinta religiosa, Son of God, el cine confesional vuelve a demostrar la fidelidad de la audiencia cristiana con God's Not Dead, que en sólo 780 pantallas recaudaba 8,5 millones. Es cierto que la bíblica Son of God arrancó bien por encima, con más de 26 millones y medio, pero no podemos obviar que aquella dispuso de muchas más salas, por encima de las 3200, y bastante más respaldo institucional.
Dentro de las producciones independientes y/o extranjeras, la europea de Lars von Trier, Nymphomaniac 1 ha recibido similar fría acogida que al otro lado del charco: Sólo 132 000 dólares en 22 pantallas, bastante por debajo de las menos sexuales Melancholia y Antichrist. Al provocador cineasta danés el tiro le ha salido por la culata...
Volviendo al "top ten", las más agudas caídas han sido para la interracial cinta de Tyler Perry, The Single Moms Club, que cae del quinto puesto al décimo, y de Need For Speed, que había debutado la semana anterior en la tercera plaza para ahora ser sexta.
En el sentido opuesto, sigue creciendo en número de salas y en ingresos The Grand Budapest Hotel, la muy europea cinta de Wes Anderson, que suma 6,7 millones y mejora su recaudación en un 85,5%.
Así ha quedado la taquilla norteamericana el fin de semana del 21 al 23 de marzo:
1- (-) "Divergente" 56 millones de dólares
2- (-) "Muppets most wanted" 16,5 millones
3- (1) "Mr. Peabody & Sherman" 11,7 millones (81 desde su estreno)
4- (2) "300: el origen de un imperio" 8,6 millones (93,7 desde su estreno)
5- (-) "God's not dead" 8,5 millones
6- (3) "Need for speed" 7,7 millones (30,4 desde su estreno)
7- (8) "The Grand Budapest Hotel" 6,75 millones (12,9 desde su estreno)
8- (4) "Non-Stop: Sin escalas" 6,3 millones (78,6 desde su estreno)
9- (6) "The LEGO movie" 4,1 millones (243,3 desde su estreno)
10- (5) "The single moms club" 3,1 millones (12,9 desde su estreno)