
"El corte de pelo de nuestros líderes es muy especial", dijo una fuente del gobierno de Corea del Norte, según la BBC. "No se ve bien en todos, ya que cada uno tiene un rostro y una forma de la cabeza diferente", agregó.
En 2005, cuando el líder supremo era Kim Jong-il, padre del actual gobernante, la televisión estatal norcoreana lanzó una serie titulada "Vamos a cortamos el cabello de acuerdo con el estilo de vida socialista", que promovía el pelo corto.
La propaganda capilar también fue reforzada con convocatorias en la prensa y radio para utilizar el "corte de cabello socialista". La serie de TV salió a las calles con cámaras ocultas para detectar a los ciudadanos "rebeldes" que rompían las normas e incluso propagó la falsa idea de que una cabellera larga quita energía al cerebro.